Escribir historias familiares

Una actividad familiar divertida

Soy afortunada por tener parientes que sí escribían las cosas, así que sé que algunos de mis ancestros de parte de mi padre fueron fueron mineros en Inglaterra quienes vivían en condiciones poco favorables. Siete de ellos vivían en una pequeña casa de dos habitaciones, una de esas habitaciones era donde todos dormían. Mi abuelo dejo Inglaterra para venir a América en 1871.

Los padres de mi madre vinieron de Polonia. Su madre era campesina y su padre era adinerado. Los padres de su padre desaprobaban la relación, así que ambos se fueron de casa para venir a América. Iniciaron una familia aquí, pero después de algunos años regresaron a Polonia. Afortunadamente, pronto volvieron a América. La granja de la familia materna de mi madre estaba localizada cerca del área donde las tropas de Hitler invadieron Polonia en 1939.

Las historias familiares pueden contarnos acerca de nuestras familias y el tipo de vidas que llevaban, pero a menos que las escribamos, pueden perderse para siempre. Aquí hay algunas formas en que tú y tus hijos pueden recolectar y preservar la historia familiar.

Reunir información

Antes de que los niños puedan escribir cualquier historia, ¡necesitan información! Pueden reunir información de ti y otros parientes: tías, tíos, abuelos. Esto puede hacerse de varias maneras.

Recopila fotos

La mayoría de las familias tienen fotos, algunas guardadas en cajas olvidadas o en viejos álbumes. Para preservar las fotos y poder compartirlas e incluso poder usarlas en proyectos, podrías querer digitaliar las fotos . Las fotos antiguas son invaluables y no sólo por lo que podemos ver en ellas. Se dice que una imagen vale más que mil palabras y eso puede ser verdad hasta cierto punto. Podemos ver cómo era la gente, las expresiones en sus rostros, la ropa que usaban, su actitud y todo esto tomaría muchas muchas palabras para ser descrito. Sin embargo, lo que las fotos no pueden decirnos es lo que las personas estaban pensando, cómo se comportaban, el tipo de relación que tenían con los demás en la foto y lo que estaba sucediendo cuando la foto fue tomada. Lo que nos interesa son las historias detrás de la fotografía.

Entrevistar parientes

Las fotos pueden ser un excelente punto de partida para reunir historias familiares. Los niños pueden sentarse contigo y otros parientes y preguntar sobre las personas en las fotos. Algunas veces, las fotos también pueden despertar otros recuerdos de las personas en ellas o los acontecimientos en el momento en que fue tomada. Pero hay mucho más que aprender de los parientes a través de entrevistas. Los niños pueden preparar sus entrevistas anotando algunas preguntas . Estos son algunos ejemplos:

  • ¿Qué les gustaba hacer para divertirse?
  • ¿Qué clase de juegos jugaban?
  • ¿Qué tipo de juguetes tenían?
  • ¿Cómo era la escuela?
  • ¿Qué estudiabas?
  • ¿Qué tipo de comidas comían?
  • ¿Cuál era tu alimento favorito? ¿Y tu comida favorita?
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  • ¿Qué tipo de tarea tenías?
  • ¿Qué quehaceres tenías?
  • ¿Tenías compensación?

¡Asegúrate de decirle a tu hijo que tome notas de la entrevista! Pero tal vez preferiría usar una grabadora de sonios para registrar las entrevistas. Estas entrevistas pueden guardarse para transmitirse. De hecho, tu hijo podría querer usar una videograbadora para algunas de las entrevistas.

Leer algo de Historia

Aunque las historias de los miembros de nuestra familia pueden decirnos mucho. También necesitamos entender la época en la que vivían los miembros de nuestra familia. ¿Qué estaba sucediendo en el país? ¿En el mundo? ¿Cuáles eran las preocupaciones de la gente? ¿Cómo era la vida para todos? Una forma de aprender sobre la vida diaria es leer algo de historia de la época en la que vivieron nuestros ancestros. Tu hijo podría estar interesado en leer algo de ficción histórica que le ofrecerá buena información para ayudarle a tener una comprensión más completa de las vidas que tenían sus ancestros.

Llena un árbol familiar

Los detalles visuales siempre hacen que la información sea fácil de entender y un árbol familiar visual no es diferente. Los niños pueden llenar los huevos de un árbol familiar para ver cómo se relacionan todos. Hace más fácil para ellos (y para ti) entender algunas de las relaciones más complejas como primos segundos o terceros. La revista Family Tree tiene un excelente árbol familiar descargable que los niños pueden usar para facilitar el trabajo. En caso de que te lo preguntes, los primos segundos serían los nietos de los hermanos. Si alguna vez se retiran, existe una generación entre los dos. Eso quiere decir que uno sería el nieto de un hermano y el otro sería el bisnieto de otro. Las tablas pueden ayudar a ilustrar estas relaciones .

Escribir historias

Una vez que tu hijo a reunido algo de información a través de las fotos y entrevistas, es tiempo de escribir algunas historias. Si a tu hijo le gusta escribir cuentos o novelas, puede contar las historias que los miembros de la familia le han relatado, pero también puede llenarlas con detalles históricos que haya reunido al leer historias de la época. Pero si tu hijo prefiere descripciones más directas de los miembros de la familia y sus experiencias, entonces sólo necesita escribir los detalles. De cualquier forma, está preservando mucha información para las futuras generaciones. Si tu hijo necesita algunas ideas sobre qué escribir, hay algunas preguntas creativas sobre la familia que puede responder. Cualquiera que sea la forma que elija tu hijo para contar su historia, podría querer algunas ideas sobre cómo hacer que éstas cobren vida. El libro ¡Muestra, no cuentes! Los secretos de la escritura (Show; Don't Tell! The Secrets of Writing) explica cómo hacer eso a través de la selección de palabras y más de una forma divertida e interesante.

Crear un libro de la historia familiar

Una vez que tu hijo haya escrito todas esas historias, ¿qué debería hacerse con ellas? ¿Por qué no crear un libro de historia familiar? La portada puede tener una copia del árbol genealógico hecho por tu hijo con alguna de las viejas fotos familiares. El libro puede organizarse por tiempo o por ramas familiares. Las fotos de los miembros de la familia pueden estar en las fotos que relatan las historias sobre esas personas o acontecimientos. También pueden incluirse fotos de casas, vecindarios, pueblos, lugares de trabajo y otros lugares de interés, dependiendo de qué historias haya escrito tu hijo.

Si has digitalizado las fotos, tu hijo puede crear el libro en la computadora usando un procesador de textos como Word u Open Office. Si tu hijo es mayor y sabe manejar bien los programas computacionales, puede emplear un programa como Publisher. Otra forma de crear fabulosos libros de historia familiar es a través de Bookemon . Bookemon es un servicio gratuito que permite a la gente crear libros de calidad de forma gratuita. Incluso puedes subir tus propias fotos. El meollo es que si quieres el libro, tienes que comprarlo, pero tienes cierto control sobre el diseño y el rango de precios. Algunos cuestan tan sólo $13.00. Puedes comprar copias de tu libro para darlo como regalo a los miembros de la familia o tan sólo decirles que el libro está ahí para que todos puedan comprar una copia.